Cafetera de vacío, de sifón o cona

CAFETERA DE “VACÍO” O "CONA"
La cafetera de vacío o 'cona' creada en los años 30 por Loeff of Berlin, y popularizada años después por Robert Napier con el modelo que llevó su nombre,“The Napier Vacuum Machine”, llega renovada gracias al uso de materiales como el borosilicato, que permiten mayor resistencia a las fuentes de calor y mejor rendimiento.
El café que se obtiene es puro, rico en sabor y aroma, resaltando sus matices.
Además de proporcionar un excelente café, uno de los atractivos de esta original cafetera es que permite visualizar todo el proceso de la infusión, convirtiéndose en el centro de atención de curiosos y cafeteros en cada día más hogares y establecimientos.
La cafetera cona o de vacío es un método de filtrado muy visual y espectacular que no deja indiferente a nadie. Si te apasiona el café y eres de deberías probar a impresionar a tus invitados
INSTRUCCIONES DE USO
1.- Pon la cantidad de agua deseada en el recipiente inferior. Aprox. 200 ml por taza.
2.- Colócalo en una cocina eléctrica, de gas o vitrocerámica a temperatura moderada o utiliza un mechero de alcohol. La parte exterior del recipiente debe estar seca. Para cocinas de gas se aconseja utilizar una rejilla de protección.
3.- Coloca el filtro dentro del embudo. El filtro tiene una cadenita unida a un pequeño gancho de alambre. Tira ligeramente de la cadena y fija el gancho al borde del tubo.
4.- Vierte el café molido para cafetera de vacío en el embudo. Calcula aprox. 10 gr por taza.
5.- Coloca el embudo sobre el recipiente inferior. Espera hasta que el agua haya hervido durante 2-3 min. El agua subirá y se mezclará con el café. Atención: Deben quedar unos 2 cm de agua en el recipiente inferior. (En caso contrario, apártalo inmediatamente del fuego para evitar riesgo de rotura por exceso de calor).
6.- Aparta la cafetera y colócala sobre una superficie seca. El café empezará a filtrarse hacia el recipiente inferior. Si este proceso se paraliza, pon la cafetera al fuego y haz hervir el agua de nuevo.
7.- Quita el embudo. ¡El café ya está listo! ¡Puedes servirlo directamente en este recipiente!
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